Aunque la Biblia no menciona específicamente los virus ni las pandemias modernas, su sabiduría antigua y sus principios atemporales ofrecen orientación, consuelo y esperanza frente a la incertidumbre y el miedo. A través de sus páginas, las Escrituras nos recuerdan la soberanía, el amor y la presencia de Dios en tiempos de prueba y sufrimiento. Desde la promesa de protección del Salmo 91 hasta la visión de sanación definitiva de Apocalipsis 21, la Biblia brinda seguridad y aliento a los creyentes que enfrentan los desafíos de la enfermedad, la pérdida y las crisis de salud mundial. A continuación, se presentan algunos versículos bíblicos clave que ofrecen consuelo, fortaleza y perspectiva en tiempos de brotes virales y pandemias.
Aquí hay algunos Versículos de la Biblia Virus:
Dijo: «Si escuchas atentamente al Señor tu Dios y haces lo que es recto ante sus ojos, si prestas atención a sus mandamientos y cumples todos sus decretos, no te envi1.aré ninguna de las enfermedades que envié a los egipcios, porque yo soy el Señor que te sana».
Éxodo 15:26 (NVI)
“Porque manifiesta es la ira de Dios del cielo contra toda impiedad é injusticia de los hombres, que detienen la verdad con injusticia”
— Romanos 1:18
«Si cierro los cielos para que no haya lluvia, o si mando a la langosta que devore la tierra, o si envío una plaga entre mi pueblo, si mi pueblo, sobre el cual es invocado mi nombre, se humilla y ora, y busca mi rostro y se aparta de su mala conducta, entonces yo lo escucharé desde los cielos, perdonaré su pecado y sanaré su tierra».
2. 2 Crónicas 7:13-14 (NVI)
“He aquí, tenemos por bienaventurados á los que sufren. Habéis oído la paciencia de Job, habéis visto el fin del Señor, que el Señor es muy misericordioso piadoso”
— Santiago 5:11
Sin duda él te librará de la trampa del cazador y de la peste mortífera. Él te cubrirá con sus plumas, y debajo de sus alas encontrarás refugio; su fidelidad será tu escudo y tu baluarte. No temerás el terror de la noche, ni la flecha que vuela de día, ni la peste que acecha en la oscuridad, ni la plaga que destruye al mediodía.
3. Salmo 91:3-6 (NVI)
“ENTONCES llamando á sus doce discípulos, les dió potestad contra los espíritus inmundos, para que los echasen fuera, sanasen toda enfermedad toda dolencia”
— Mateo 10:1
Si no cuidas de poner por obra todas las palabras de esta ley, que están escritas en este libro, y no temes este nombre glorioso y temible, el Señor tu Dios, el Señor enviará sobre ti y sobre tu descendencia terribles plagas, desastres severos y prolongados, y enfermedades graves y prolongadas. Él traerá sobre ti todas las enfermedades de Egipto que temías, y ellas se te pegarán.
4. Deuteronomio 28:58-61 (NVI)
“Como fué en los días de Noé, así también será en los días del Hijo del hombre”
— Lucas 17:26
“‘Sin embargo, yo traeré sanidad y curación a ella; Yo sanaré a mi pueblo y le daré abundante paz y seguridad”.
5. Jeremías 33:6 (NVI)
“Porque de tal manera amó Dios al mundo, que ha dado á su Hijo unigénito, para que todo aquel que en él cree, no se pierda, mas tenga vida eterna”
— Juan 3:16
Se levantará nación contra nación y reino contra reino. Habrá hambrunas y terremotos en varios lugares.
6. Mateo 24:7 (NVI)
“Oiréis guerras, rumores de guerras: mirad que no os turbéis; porque es menester que todo esto acontezca; mas aún no es el fin”
— Mateo 24:6
¿Está enfermo alguno entre ustedes? Que llamen a los ancianos de la iglesia para que oren por él y lo unjan con aceite en el nombre del Señor. Y la oración ofrecida con fe sanará al enfermo y el Señor lo levantará. Si ha pecado, será perdonado.
7. Santiago 5:14-15 (NVI)
“Aunque ande en valle de sombra de muerte, No temeré mal alguno; porque tú estarás conmigo: Tu vara tu cayado me infundirán aliento”
— Salmos 23:4
“El corazón alegre produce buena disposición: Mas el espíritu triste seca los huesos”
— Proverbios 17:22
“Anda, pueblo mío, éntrate en tus aposentos, cierra tras ti tus puertas; escóndete un poquito, por un momento, en tanto que pasa la ira”
— Isaías 26:20
“Miré, he aquí un caballo amarillo: el que estaba sentado sobre él tenía por nombre Muerte; el infierno le seguía: le fué dada potestad sobre la cuarta parte de la tierra, para matar con espada, con hambre, con mortandad, con las bestias de la tierra”
— Apocalipsis 6:8
“Torre fuerte es el nombre de Jehová: A él correrá el justo, será levantado”
— Proverbios 18:10
“Por nada estéis afanosos; sino sean notorias vuestras peticiones delante de Dios en toda oración ruego, con hacimiento de gracias”
— Filipenses 4:6
“Dijo: Si oyeres atentamente la voz de Jehová tu Dios, é hicieres lo recto delante de sus ojos, dieres oído á sus mandamientos, guardares todos sus estatutos, ninguna enfermedad de las que envié á los Egipcios te enviaré á ti; porque yo soy Jehová tu Sanador”
— Éxodo 15:26
“Si yo cerrare los cielos, que no haya lluvia, si mandare á la langosta que consuma la tierra, ó si enviare pestilencia á mi pueblo”
— 2 Crónicas 7:13
“El es quien perdona todas tus iniquidades, El que sana todas tus dolencias”
— Salmos 103:3
“Mas á Jehová vuestro Dios serviréis, él bendecirá tu pan tus aguas; yo quitaré toda enfermedad de en medio de ti”
— Éxodo 23:25
“Tú eres mi refugio; me guardarás de angustia; Con cánticos de liberación me rodearás. (Selah.)”
— Salmos 32:7
“Hermanos míos, tened por sumo gozo cuando cayereis en diversas tentaciones”
— Santiago 1:2
“Empero agravóse la mano de Jehová sobre los de Asdod, destruyólos, é hiriólos con hemorroides en Asdod en todos sus términos”
— 1 Samuel 5:6
“Estatuto perpetuo por vuestras edades; en todas vuestras moradas, ningún sebo ni ninguna sangre comeréis”
— Levítico 3:17
“No tendrás dioses ajenos delante de mí”
— Éxodo 20:3
“Humillaos delante del Señor, él os ensalzará”
— Santiago 4:10
“Respondiendo él, les dijo: ¿Veis todo esto? de cierto os digo, que no será dejada aquí piedra sobre piedra, que no sea destruída”
— Mateo 24:2
“Envió su palabra, curólos, librólos de su ruina”
— Salmos 107:20
“Sean las costumbres vuestras sin avaricia; contentos de lo presente; porque él dijo: No te desampararé, ni te dejaré”
— Hebreos 13:5
“Habrá grandes terremotos, en varios lugares hambres pestilencias: habrá espantos grandes señales del cielo”
— Lucas 21:11
“Tenemos empero este tesoro en vasos de barro, para que la alteza del poder sea de Dios, no de nosotros”
— 2 Corintios 4:7
“El leproso en quien hubiere llaga, sus vestidos serán deshechos su cabeza descubierta, embozado pregonará: Inmundo! inmundo”
— Levítico 13:45
“Porque yo protesto á cualquiera que oye las palabras de la profecía de este libro: Si alguno añadiere á estas cosas, Dios pondrá sobre él las plagas que están escritas en este libro”
— Apocalipsis 22:18
“Á unos que decían del templo, que estaba adornado de hermosas piedras dones, dijo”
— Lucas 21:5
“Si en la piel de su carne hubiere mancha blanca, pero no pareciere más hundida que la tez, ni su pelo se hubiere vuelto blanco, entonces el sacerdote encerrará al llagado por siete días”
— Levítico 13:4
“La paz de Dios, que sobrepuja todo entendimiento, guardará vuestros corazones vuestros entendimientos en Cristo Jesús”
— Filipenses 4:7
“Ciertamente con tus ojos mirarás, verás la recompensa de los impíos”
— Salmos 91:8
“Diré yo á Jehová: Esperanza mía, castillo mío; Mi Dios, en él confiaré”
— Salmos 91:2
“Porque se levantará nación contra nación, reino contra reino; habrá pestilencias, hambres, terremotos por los lugares”
— Mateo 24:7
“Jehová dijo á Moisés á Aarón: Tomad puñados de ceniza de un horno, espárzala Moisés hacia el cielo delante de Faraón”
— Éxodo 9:8
“Si alguno dice, Yo amo á Dios, aborrece á su hermano, es mentiroso. Porque el que no ama á su hermano al cual ha visto, ¿cómo puede amar á Dios á quien no ha visto?”
— 1 Juan 4:20
“Si se humillare mi pueblo, sobre los cuales ni nombre es invocado, oraren, buscaren mi rostro, se convirtieren de sus malos caminos; entonces yo oiré desde los cielos, perdonaré sus pecados, sanaré su tierra”
— 2 Crónicas 7:14
“Envían á él los discípulos de ellos, con los Herodianos, diciendo: Maestro, sabemos que eres amador de la verdad, que enseñas con verdad el camino de Dios, que no te curas de nadie, porque no tienes acepción de persona de hombres”
— Mateo 22:16
“Ninguno puede servir á dos señores; porque ó aborrecerá al uno amará al otro, ó se llegará al uno menospreciará al otro: no podéis servir á Dios á Mammón”
— Mateo 6:24
“El Espíritu del Señor es sobre mí, Por cuanto me ha ungido para dar buenas nuevas á los pobres: Me ha enviado para sanar á los quebrantados de corazón; Para pregonar á los cautivos libertad, á los ciegos vista; Para poner en libertad á los quebrantados”
— Lucas 4:18
“Cuando el hombre tuviere en la piel de su carne hinchazón, ó postilla, ó mancha blanca, hubiere en la piel de su carne como llaga de lepra, será traído á Aarón el sacerdote, ó á uno de los sacerdotes sus hijos”
— Levítico 13:2
“LA revelación de Jesucristo, que Dios le dió, para manifestar á sus siervos las cosas que deben suceder presto; la declaró, enviándo la por su ángel á Juan su siervo”
— Apocalipsis 1:1
“No temas, que yo soy contigo; no desmayes, que yo soy tu Dios que te esfuerzo: siempre te ayudaré, siempre te sustentaré con la diestra de mi justicia”
— Isaías 41:10
“Miré, he aquí un caballo blanco: el que estaba sentado encima de él, tenía un arco; le fué dada una corona, salió victorioso, para que también venciese”
— Apocalipsis 6:2
“El ladrón no viene sino para hurtar, matar, destruir: yo he venido para que tengan vida, para que la tengan en abundancia”
— Juan 10:10
“De consiguiente, vino la reconciliación por uno, así como el pecado entró en el mundo por un hombre, por el pecado la muerte, la muerte así pasó á todos los hombres, pues que todos pecaron”
— Romanos 5:12
“Mas, oh amados, no ignoréis esta una cosa: que un día delante del Señor es como mil años mil años como un día”
— 2 Pedro 3:8
